En una pequeña habitación blanca, en Cambridge, rodeados de vidrio, tiza y papeles, James y Francis estrujan su sesera intentando recomponer un puzzle, uno muy pequeño, diminuto, que sin embargo tiene grabado sobre sus piezas la solución a un misterio insondable, mapa del tesoro que los ojos de los hombres, en su infinita ceguera, hasta ése día no han sido incapaces de desvelar, la estructura de una pequeña llave helicoidal, frágil y microscópica que custodia, ingenio del tiempo y la evolución, el destino y los secretos del propio ser humano.
El ADN.
Como suele pasar con estas cosas, James y Francis, probablemente no son los tipos más listos del lugar, ni los más respetados, ni acumulan en las paredes de sus despachos docenas de titulaciones y premios, aún no, quizás por su juventud, se parecen mas a dos niños superdotados que juegan con piezas de madera, que dejan volar su imaginación construyendo castillos en el aire, estructuras imposibles, imaginando un modelo y comparándolo con las…
El ADN.
Como suele pasar con estas cosas, James y Francis, probablemente no son los tipos más listos del lugar, ni los más respetados, ni acumulan en las paredes de sus despachos docenas de titulaciones y premios, aún no, quizás por su juventud, se parecen mas a dos niños superdotados que juegan con piezas de madera, que dejan volar su imaginación construyendo castillos en el aire, estructuras imposibles, imaginando un modelo y comparándolo con las…